Coloridos, sabrosos y llenos de beneficios, los cítricos son mucho más que una fruta refrescante. Incorporarlos en la alimentación diaria es una forma natural de sumar vitaminas, minerales y antioxidantes esenciales para el cuerpo. En esta nota te contamos por qué son aliados de una vida saludable.
Vitamina C: Refuerzo natural para tu cuerpo
La estrella de los cítricos es la vitamina C (ácido ascórbico), conocida por fortalecer el sistema inmunológico, favorecer la producción de colágeno y actuar como antioxidante, combatiendo los radicales libres.
Vitaminas del complejo B: energía pura
Los cítricos también contienen varias vitaminas del complejo B, claves para el metabolismo y el bienestar general:
- B1 (Tiamina): Contribuye a la transformación de los alimentos en energía.
- B2 (Riboflavina): Importante para la producción de energía y el mantenimiento de tejidos.
- B3 (Niacina): Ayuda a mantener la salud del sistema nervioso y la piel.
- B6 (Piridoxina): Fundamental para la producción de neurotransmisores y el equilibrio emocional.
- Ácido fólico (B9): Esencial en la formación de nuevas células, especialmente importante durante el embarazo.
Vitamina A y antioxidantes para una visión y piel saludables
El betacaroteno, presente en algunos cítricos como la naranja y la mandarina, se convierte en vitamina A, un nutriente clave para la salud ocular, la regeneración celular y la protección de la piel contra agentes externos.
Minerales y flavonoides: un extra de bienestar
Además de su riqueza en vitaminas, los cítricos aportan minerales como el potasio y el magnesio, esenciales para la hidratación y la función muscular. También contienen flavonoides, poderosos antioxidantes que ayudan a reducir la inflamación y mejorar la circulación.
Los jugos Frescor están elaborados con pulpa natural y prensado en frío para conservar todos sus nutrientes y vitaminas. Una manera más práctica y deliciosa de disfrutar todos los beneficios de los cítricos, manteniendo su frescura y propiedades intactas.