La hidratación es fundamental en todas las etapas de la vida, pero en la infancia adquiere una relevancia especial. Un consumo adecuado de agua no solo ayuda a su desarrollo físico, sino que también es clave para su rendimiento cognitivo y bienestar general. Aquí te compartimos algunas recomendaciones para fomentar buenos hábitos de hidratación en los más pequeños:
1. Ofreceles un vaso de agua al comenzar el día.
Al despertar, el cuerpo ha pasado varias horas sin recibir líquidos, por lo que es crucial ofrecerles un vaso de agua para reponer líquidos. Este sencillo gesto ayuda a activar el metabolismo y a preparar el organismo para las actividades diarias.
2. Antes de salir de casa, guardá en su mochila una botella de agua.
Ya sea que vayan al colegio, al club o a cualquier otra actividad, asegurate de que lleven una botella de agua en su mochila, es la mejor manera de garantizar que puedan hidratarse en cualquier momento.
3. Recordales que beban agua con regularidad, despacio y a pequeños sorbos
Los niños a menudo se olvidan de beber agua, especialmente cuando están concentrados en jugar o estudiar. Es importante recordarles que tomen agua con regularidad, preferiblemente despacio y a pequeños sorbos, para mantener una hidratación constante y evitar molestias estomacales.
4. Contales la importancia que tiene el agua para la salud
Educar a los niños y niñas sobre la importancia del agua para su salud es esencial. Explicales cómo el agua ayuda a mantener su cuerpo en funcionamiento, desde la digestión hasta la regulación de la temperatura corporal, y cómo una buena hidratación contribuye a que se sientan bien y con energía.
5. Concientizalos sobre la ingesta de agua al realizar actividad física
La actividad física incrementa la necesidad de agua en el cuerpo, por lo que es vital que los niños aprendan a beber más agua antes, durante y después de hacer ejercicio. Una buena hidratación les permitirá disfrutar de sus actividades deportivas al máximo y prevenir el agotamiento y la deshidratación.
Fomentar estos hábitos desde la infancia es una inversión en la salud a largo plazo. En Frescor, nos comprometemos a promover la hidratación saludable en todas las etapas de la vida. Acompañá y motivá a tus hijos en este proceso. ¡El bienestar empieza con un vaso de agua!